David Williams, periodista nacional del motor y ganador de un premio de seguridad vial
¿Recuerdas cómo, en los viejos tiempos, todo el mundo se amontonaba en el coche familiar en Navidad, conduciendo cientos de kilómetros mientras cantaban alegremente villancicos, sólo para disfrutar de un tiempo maravilloso con sus parientes en el otro lado del país?
Yo tampoco, pero eso no ha impedido que un proveedor nacional de averías elabore estadísticas que dicen que sí, y que todo va a cambiar en 2015...
Un estudio de Green Flag muestra que en 2005 más de la mitad de los británicos (55%) dijo que "nada" les impediría visitar a sus familias en Navidad y que harían "todo lo posible" para asegurarse de que lo hicieran.
Ahora, sin embargo, sólo el 33% dice lo mismo, y el 67% afirma que problemas como viajar largas distancias (24%), "conversaciones incómodas y aburridas" con la familia (25%) y "no poder beber" por tener que conducir (18%) hacen que ya no se molesten. ¿Puede ser esto cierto?
Hace diez años, lo normal era disfrutar de sólo siete días libres en el trabajo durante el periodo festivo, y el 32% optaba por pasar dos días con toda la familia. Ahora es común tener 10 o más días libres, aparentemente, pero nuestro tiempo dedicado a la familia no ha aumentado en consonancia, ya que el 32% sigue pasando sólo un par de días con sus parientes.
Resulta que las razones por las que decidimos evitar a la familia en Navidad incluyen cuestiones de transporte, como los costosos viajes, así como temas de conversación. Una sexta parte (14%) de nosotros se preocupa ahora por los conductores peligrosos en la carretera, una cifra que ha aumentado un 100% en los últimos diez años, mientras que en 2005 sólo lo hacía el 7%.
Otros motivos son el mal tráfico (16%) y el coste del viaje (13%), que ha pasado de una media de 35,78 a 51,66 euros en los últimos diez años.
Sin embargo, para los incondicionales que siguen dispuestos a afrontar el largo trayecto hasta el restaurante, la radio sigue siendo una opción popular de entretenimiento en el coche, ya que el 70% la escuchaba en 2015 frente al 65% en 2005, aunque nuestra elección musical ha cambiado drásticamente.
Adele encabeza ahora la encuesta como el artista que más escuchan las familias cuando conducen de vuelta a casa durante el periodo navideño. Hace una década, el rompecorazones Robbie Williams, ex Take That, encabezaba la lista de canciones preferidas por las familias durante los viajes por carretera, con más de una cuarta parte (28%) de los británicos que lo nombraban como su preferido, por delante de Slade (22%), Oasis (21%) y Band Aid (20%). Este año los favoritos, después de Adele, son Taylor Swift (30 por ciento), Slade (29 por ciento) y Ed Sheeran (28 por ciento).
Hay otro gran cambio. En 2005, sólo el uno por ciento de nosotros navegaba por Internet con un teléfono o una tableta, una cifra que ha aumentado un 900%, ya que ahora una sexta parte (14%) navega para entretenerse. El número de los que piensan ver películas en una tableta durante el trayecto ha pasado del 3% en 2005 al 25% en la actualidad (con suerte, sin incluir al conductor).
Los juegos tradicionales siguen siendo populares. En 2015, un tercio de nosotros (34%) juega a juegos como el espionaje ocular, frente a una cuarta parte (25%) hace diez años.
Lo que me hizo pensar. Cuando configuré mi dashcam Nextbase, la nueva y elegante dashcam 512G, había una opción para incluir -o no incluir- sonido en la grabación.
Yo opté por no incluirlo (por si acaso me pillaban cantando para mis adentros; no es un sonido agradable). Pero ahora pienso volver a activarla. Piensa en lo divertido que será -aunque no pase nada que la cámara pueda captar- si guardas parte de la banda sonora para años venideros y reproduces imágenes de todas esas peleas familiares sobre quién se sienta dónde, cuántas veces paras, dónde paras, qué escuchas en la radio, las canciones a coro, etcétera. Y todos esos cotilleos sobre esos horribles colegas que acabas de dejar atrás, a cientos de kilómetros al otro lado del país.
Le deseo una feliz Navidad y un próspero Año Nuevo.