David Williams, periodista nacional del motor y ganador de un premio de seguridad vial

Hay dos preguntas que temo en las reuniones. La primera, cuando la gente se entera de que mi trabajo consiste en probar coches, es "¿cuál es tu favorito? La segunda, más difícil, es "¿qué coche debería comprarme?

La primera es un reto porque, durante muchos años, he conducido un coche diferente cada semana del año, a veces varios a la semana, para satisfacer la demanda de análisis de coches de periódicos y revistas.

Con tantos entre los que elegir, entro en un estado de parálisis mental. ¿Cómo elegir entre, por ejemplo, ese fantástico Ford Fiesta nuevo con el que era tan fácil moverse por la ciudad y el fantástico Range Rover que parecía demasiado grande en la ciudad, pero era impresionante en carretera?

¿Y qué me dices de aquella vez que metí a todos los amigos de mi hija en el espacioso minibús Hyundai i800 para su fiesta de cumpleaños? Fue todo un éxito, igual que el fantástico Lotus Esprit, hace años, cuando conduje con mi novia (ahora esposa) por la llanura de Salisbury en un día soleado. ¿Cómo se puede comparar? Así que eludo la pregunta y digo que prefiero una moto, momento en el que los interlocutores suelen perder el interés. Si no lo hacen, estoy en el paraíso; estaré encantado de hablar de motos todo el día.

¿Y la otra pregunta? Lo que realmente quieren mis interrogadores es confirmar su propia elección. Así que si dicen que han decidido que el Skoda Yeti, por ejemplo, es la respuesta perfecta a los problemas de transporte de su familia, me apresuro a darles la razón. Trabajo hecho. Hasta la próxima vez que me pregunten.

Porque habrá una próxima vez. ¿Sabías que los británicos tienen unos 11 coches diferentes a lo largo de su vida, y que el Ford Fiesta es casi una constante? Lo descubrí esta semana cuando los expertos en financiación de coches de Zuto encuestaron a 2.000 conductores, revelando la cronología de nuestras compras de coches desde el momento en que aprobamos el examen hasta que llegamos a la jubilación.

Y aunque lo que más necesitan los automovilistas de un coche -y el coste de cada motor- cambia con el tiempo, el Ford Fiesta parece seguir siendo la opción más popular en todas las etapas de nuestra vida. También se puso de manifiesto que compramos nuestro primer coche a los 23 años, normalmente un Ford Fiesta, un KA o un Vauxhall Corsa de unos 1.574 euros.

"Para la mayoría de nosotros comprar un coche no es hacer una compra extravagante, es una necesidad para el día a día", dice James Wilkinson, CEO de Zuto. "Pero estamos comprando coches basándonos en decisiones económicas en casi todas las etapas de nuestra vida".

El patrón es, hasta cierto punto, obvio. Los investigadores descubrieron que, tras pasar los primeros años tomando prestado el coche de papá y mamá, finalmente compramos nuestro propio motor a los 23 años. Los dos primeros años necesitamos un coche barato y alegre, para pasar a un coche familiar más grande cuando nos asentamos en la vida familiar. En los últimos años seguimos buscando algo rentable para ir de A a B.

Casi uno de cada cinco eligió un Ford Fiesta como primera compra, con el Vauxhall Corsa, el Ford KA, el Nissan Micra y el Renault Clio entre otras opciones populares.

Cinco años más tarde, en torno a los 28 años, los británicos compran su segundo coche, muy probablemente otro Ford Fiesta o Ford Focus por valor de unas 2.107 libras. Pero a los 32 años, tras sentar la cabeza, el británico medio compra su primer coche familiar, un Ford Focus o Fiesta valorado en 7.997 £. Los Vauxhall también son una opción popular cuando se busca un coche familiar, con el Astra, el Zafira y el Corsa entre los cinco primeros.

Después de conformarse con una media de tres coches de segunda mano, el británico medio está en condiciones de comprar su primer coche nuevo a los 34 años. El Ford Fiesta, el Vauxhall Corsa y el Focus siguen siendo los más populares, junto con el Vauxhall Astra y el Ford KA, con un valor medio de 11.548 libras.

Después de criar a su familia, los británicos abandonan el coche pensado para los niños para comprarse finalmente el coche de sus sueños a los 42 años: probablemente un Mercedes Benz, un BMW serie 3 o un Mini por valor de 14.627 £.

Finalmente, a los 54 años, empezamos a mirar hacia nuestra jubilación, comprando un coche como el Ford Fiesta o el Toyota Yaris, afirma Zuto, aunque a mí no me convence. Eso suena demasiado pronto para 'sentar la cabeza'...

Una buena noticia para la industria automovilística es que el británico medio compra un coche nuevo cada cinco años y medio. La mala noticia para mí es que eso significa una larga, larga lista de preguntas sobre "qué debería comprar" durante los próximos años...